La moda de las minicasas empezó en Estados Unidos hace más de una década. Allí, pronto se popularizó el conocido como ‘Tiny House Movement’ (el movimiento de la casa diminuta, en inglés), que suma ya miles y miles de adeptos.
Este curioso fenómeno, el de preferir casas minúsculas para vivir, fue visto en un primer momento como una excentricidad o una absurda moda pasajera por la sociedad norteamericana, pero ya ha inspirado varios ‘reality shows’. Ni dos ni tres. Hasta media docena de programas han exprimido el ‘boom’ de las construcciones minúsculas. Los más populares son ‘Buscadores de minicasas’, ‘Minicasas sobre ruedas’, ‘Minicasas Luxury’ y ‘Quiero mi minicasa’.
Mucho más baratas
En España, el fenómeno está cada vez cobrando mayor aceptación. El hecho de que el tiempo de construcción sea menor que en el caso de una vivienda convencional hace que sean mucho más económicas y que se planteen como una opción perfecta para segundas residencias, sobre todo, ahora que están subiendo las hipotecas por el alza de los tipos de interés.
Las empresas que construyen casas prefabricadas o minicasas son muchas, desde las que se pueden encontrar en Aliexpress desde 11.000 euros hasta las cabañas prefabricadas que construye Onarc.
Entre 33.000 y 66.000 euros
Una de las empresas que más tiempo lleva en este sector de las ‘tiny house’ es Noma House, que fabrica viviendas cuyos precios oscilan entre los 33.000 y los 60.000 euros, en función del modelo y diseño.
Tania González, una de las cofundadoras de esta empresa catalana, explica al portal inmobiliario Idealista que en los últimos tiempos el interés por este tipo de casas se ha visto incrementado en un 30%.
Mes o mes y medio
La construcción dura alrededor de un mes o mes y medio «si el diseño es más complejo», y la demanda ha crecido desde los jóvenes hasta grupos de mayor edad, hasta tal punto de que cuenta con «lista de espera de ocho meses», comenta González.
En el caso de esta empresa, las casas «se entregan totalmente acabadas, llave en mano», sostiene una de sus cofundadoras. Entre otras comodidades, se incluye una «cocina completa con horno, vitrocerámica, campana, baño completo con plato de ducha, mueble de baño e inodoro». Además, estas viviendas «están totalmente preparadas para conectarse a la red o se pueden configurar para que sean autosuficientes», añade.
Normativa concreta
Hay que tener en cuenta que cada comunidad autónoma y cada ayuntamiento tiene una normativa concreta en cuanto a la construcción de viviendas, por lo que es necesario consultar con las administraciones públicas locales para cerciorarse de si es posible construirse una o no.
Fuente: https://www.elperiodico.com/
