En un barrio de casas unifamiliares, cerca de la norteamericana Universidad de Oregón, el estudio Waechter Architecture ha ejecutado una casa sencilla de una sola planta y con cuatro pabellones que invita a disfrutar del esplendor de la naturaleza en cada una de las estaciones. Su patio central es el protagonista.
La propietaria de esta casa buscaba crear una conexión profunda entre su vienda y la naturaleza, ya que se encuentra en la reserva natural de praderas en Oregón. Conseguirlo fue un asunto de familia ya que encargó a Ben Waechter, fundador del estudio Waechter Architecture que ejecutara su vivienda ubicada en un vecindario de casas unifamiliares modestas en el distrito de College Hill, cerca de la norteamericana Universidad de Oregón. El resultado es Madison Meadow una casa sencilla en apariencia de una sola planta y dividida en cuatro pabellones.
Cuatro terrazas, dos abiertas y dos encerradas en paredes de ventanas de cristal, sostienen las principales áreas de estar y ofrecen espacios de descanso para disfrutar todas las estaciones. Con un patio central al aire libre, la casa permite que el paisaje y el cambio de estaciones sirvan como una importante experiencia en el lugar.
Exterior
La casa contiene una pradera dentro de una pradera. Desde arriba, la construcción se lee como una serie de marcos: el perímetro del bloque residencial, el límite exterior de la pradera, la sencilla forma rectilínea de la casa metida en su esquina noreste, y dentro, un claro central que recuerda el terreno original.
Fachada
La familia buscó crear una residencia adyacente al prado donde se ubica la casa al mismo tiempo que honraba su carácter y valor como recurso para toda la comunidad.
En acero
Las paredes de los cuatro pabellones, el techo inclinado y los plafones profundos de Meadow House están completamente revestidos de acero «bonderizado», que se desgastará de forma natural sin necesidad de pinturas ni acabados adicionales.
El patio
Este patio conserva el mismo carácter natural y vegetación que el paisaje circundante y organiza las diversas funciones y espacios habitables dentro de la residencia.
Patio con salida a la calle
Laa casa se divide en cuatro pabellones pequeños. Un volumen independiente de garaje y taller ancla la esquina noroeste, y un volumen destinado a la cocina está ubicado al noreste a lo largo de la calle. Al sur, un dormitorio en suite y el dormitorio principal se ubican entre el patio y el prado abierto. Cuatro terrazas, dos abiertas y dos encerradas en paredes de ventanas de cristal acogen las principales áreas de estar de la casa y ofrecen conexión con el paisaje durante todo el año.
Conexión con la pradera
La fuerte resistencia a la corrosión y al daño por agua de los materiales elegidos también permite que los techos inclinados hacia adentro recojan el agua de lluvia directamente en el jardín central. «En general, cada decisión de diseño y selección de materiales se tomó teniendo en cuenta la economía, la durabilidad y la conservación», apunta el arquitecto.
Paredes de cristal
Los muros de cristal abren vistas internas hacia los patios creados entre los diferentes volúmenes que componen la casa.
Salón
Las formas simples y la paleta de colores escogida en el interiorismo de la casa permiten que la vitalidad salvaje del prado y el cambio de estaciones definan la experiencia principal del lugar.
Fuente: https://www.arquitecturaydiseno.es/casas/el-patio-central-de-esta-casa-nos-ha-provocado-una-nueva-necesidad-vital-_8608