- No es un asunto nada nuevo en ese país, la costumbre viene desde la colonia.
Es común observar casas de madera en programas o películas estadounidenses. Estas viviendas se caracterizan por tener detalles muy bien elaborados y su estructura parece incluso de concreto.
La construcción de casas de madera no es un asunto nada nuevo en ese país. La costumbre viene desde la colonia; al llegar los europeos estos se vieron en la necesidad de construir viviendas y aprovecharon la gran cantidad de recursos forestales presentes en el ‘nuevo mundo’.
Esta situación es muy parecida a la que ocurrió en otras tierras americanas, por ejemplo en Guayaquil (Ecuador), cuando los colonizadores aprovecharon la gran cantidad de árboles para levantar viviendas y otras estructuras. Ejemplo de esto fue la Casa Consistorial o el puente de las 800 varas; incluso los grandes galeones de la Corona española se construían en los astilleros de estas tierras.
El portal estados-unidos.info detalla que la arquitectura estadounidense hasta 1850 se basaba exclusivamente en la madera para la construcción, hasta que poco a poco se fue introduciendo el ladrillo para construir ciertas habitaciones o estilos de vivienda que quedaban bien con este material.
En la actualidad son pocas las casas de ladrillo y techos de arcilla debido al coste económico que supone adquirir estos materiales y la mano de obra al construirlas, que está un poco por encima del presupuesto para construir una casa de madera. Los elevados impuestos que significa construir con ladrillo también es una desventaja.
Otro punto a favor que ven los estadounidense a la hora de ir por una casa de madera, es que el precio de la misma está muy por debajo de una con ladrillos, esto debido a que existen miles de hectáreas en EE. UU. destinadas al cultivo maderas flexibles y resistentes para la construcción de viviendas.
Las ventajas que también se toman en cuenta es que los propietarios pueden construir las casas con sus propias manos, al encargar las maderas necesarias para esto; o la resistencia frente a los sismos, gracias a la flexibilidad del material.
No obstante las construcciones de madera tienen desventajas frente a fenómenos climáticos, como tornados o huracanes. Los incendios también son otros peligros contantes, un caso es el Gran Incendio de Chicago, el 8 de octubre de 1871; o los devastadores siniestros que soportó Guayaquil.
Si bien en Guayaquil y otras localidades la construcción a base de hormigón armado se impuso en el siglo XX, la realidad estadounidense fue otra, al menos en los suburbios, no así en los centros de las grandes urbes, en donde los rascacielos necesariamente tuvieron que construirse en concreto.
Otra desventaja que tiene construir en madera es que si no se le aplica un mantenimiento preventivo, estas estructuras pueden ser víctima de termitas o moho y degradarse fácilmente.
Fuente: https://www.eluniverso.com/